sábado, 30 de agosto de 2014

SAN MAMÉS NUNCA FALLA AL ATHLETIC

Otro partido más San Mamés se ha engalanado para acoger a su Athletic, no era Champions, no era ninguna cita histórica ni siquiera un rival de especial enjundia, era otro partido de liga y contra el Levante. Y ahí estaban sus fieles (seguidores) un día más cantando el himno como si fuera lo último que fueran a hacer en su vida, encomiable y digno de orgullo, se me ponen los pelos de punta.


Y como no podía ser de otra manera, el equipo respondió como lleva haciéndolo últimamente, un 3-0 contundente y casi hasta con suficiencia frente a un Levante más voluntarioso que otra cosa, aunque apenas tuviera ni la más remota idea de sacar algo de La Catedral. Aduriz, Iturraspe y Muniain hacían los goles.

Mención especial creo que merece de una vez por todas Gorka Iraizoz; criticado, abucheado, "run-runeado" por una afición siempre crítica con la posición más sagrada del club, el portero rojiblanco transmite una seguridad que hacía tiempo que no se sentía. Ya nadie tiene dudas de que es el dueño del arco de San Mamés.


Cayó al pozo cuando se lesionó en el bíceps femoral ya con Caparrós y desde entonces no acababa de asentarse en la portería. Con Bielsa también fue el dueño y señor de la meta pero tampoco la gente ni sus compañeros de la zaga lograban estar cómodos. Ni con Valverde tuvo un buen comienzo y alternó con Herrerín unas cuantas jornadas.

Pero se levantó, dio un puñetazo en sobre la mesa y gritó alto y claro un "aquí estoy yo" del que pocos se dan cuenta porque no le critican, aunque la ausencia de dichas críticas haga que se entera más gente de lo que parece, simplemente no se le reconoce como se merece. ¡Ojo! Y yo soy el primero que reconoce que el Athletic necesitaba un portero. Creo que con trabajo y tesón se ha ganado el derecho, no sólo a que nadie dude de él, si no a que todo el mundo le reconozca como el amo de la portería del Athletic.

viernes, 29 de agosto de 2014

EL ATHLETIC ES DE CHAMPIONS (TXANPIONS)

Suelo escribir con los sentimientos a flor de piel, nada más se acaban los partidos o acontecen las cosas, la emoción del otro día necesitaba de un reposo para aclarar emociones, dominarlas para nominarlas y tiempo para que sean asentadas y perecederas. Para todo eso y para dejar de llorar de alegría porque no lograba a enfocar para ver la pantalla.

Todo el cariño que le tengo a Bielsa hizo que sintiera cierta nostalgia porque me hubiera hecho mucha ilusión que esto hubiera ocurrido con él en el banquillo, una vez alejado de eso e imbuido en el sentimiento zurigorri más profundo, entiendo que no hay afición en el mundo que pueda sentir lo que sentimos nosotros cuando logramos una mera clasificación para el máximo torneo continental. Y digo "mera" porque hay equipos que se clasifican cada año, y no puedo no sentir tristeza porque lo hacen de forma tan habitual que le han quitado el valor; aunque también es cierto que con esos presupuestos es lo mínimo que se les pide.


Valverde lo ha logrado. Sin estridencias, sin "marcar" una época, sin ser el protagonista de ningún libro, discreto y efectivo a más no poder. Y su equipo cada vez me gusta más. Y el valor de sacar a un chaval de 18 años que debutaba en el primer equipo cuando el club se juega el pase a la Champions League tiene mucho mérito. Sí, amigos, el himno de la Champions ha sonado y sonará otras 3 veces mínimo, si no son 4, 5 ó 6 más, en San Mamés. Un estreno por todo lo alto.

Disfrutemos de la experiencia como haríamos antes, y exijámonos como hacemos ahora. A los torneos no se va a estar, se va a ganar, sabiendo que los hay mejores pero valorando que a un partido no somos inferiores a nadie.