EL ATHLETIC VA DE TURISMO A GRANADA. NI RICO NI CON FUNDAMENTO

EL Athletic de Valverde sigue sin tener la personalidad suficiente para imponerse con claridad a equipos manifiestamente inferiores, como ayer el Granada. Y es que los rojiblancos, ayer azules como el Everton, pasaron de su centro del campo y cuando el balón le cae, literalmente le cae, a cualquiera de los que deambulan bajo la parábola que describe el esférico entre San José y Aduriz la desconexión que existe de ellos con el juego y el ritmo del partido se hace patente y se convierten en máquinas de perder balones (90 balones perdidos ayer en total).

Herrera y Beñat son un fiel reflejo del juego del Athletic, pues la conexión central-delantero es mucho mayor que medio-medio y se pasan el partido suspirando por tener que ver algo en el partido. Pasa tanto tiempo desde que tocan un balón al otro que muchas veces no saben ni qué hacer con él. Si a esto le sumamos que el Ibai contra el Betis se quedó en Bilbao y que Rico pierde el doble de balones que los que recupera, tenemos un partido en el que o se marcan un gol en propia los rivales o pierdes de todas todas.

Ayer cabe destacar las actuaciones de Iraizoz (que me gustaría que se tirara un penalti con la convicción de pararlo) que estuvo muy seguro y salvador bajo palos así como en dos salidas de puños y en otra en un balón largo de Buonanote que volvió loco a todo el equipo; a Gurpegui por dejar patente que Bielsa no es el loco y que el central tiene el que mejor capacidad de anticipación de toda la plantilla y aborta muchas ocasiones rivales de aproximación al área; y a Susaeta más por voluntad, atrevimiento y sentido de la responsabilidad que por acierto, pero en noches como ayer pues se agradece que alguien coja las riendas del equipo.

Y una pregunta: ¿qué tiene que hacer De Marcos para ser titular? ¿O su papel es la de resolver partidos? Si Aduriz no está (que se ponga la camiseta y salte al césped es una cosa y estar es otra) porque se pasa todo el tiempo metido y enfrascado en batallas y guerrillas con los centrales, protestando y demás, que no juegue, porque ganar con 10 desde el pitido inicial es muy complicado, a no ser que Valverde sea fan de Helenio Herrera. Y es que el juego racheado, ayer ni eso, es lo que no está salvando de no tener menos de 7 puntos. Bueno, el juego racheado y las 37.000 almas que nos arropan cada 15 días.

El juego del equipo deja mucho que desear y si el estilo que queremos es este, considero que es pan para hoy y hambre para mañana, más teniendo en cuenta que disponemos de un centro del campo bastante creativo.