lunes, 5 de noviembre de 2012

1-2. AL ATHLETIC POR FIN LE SALIÓ CARA EN GRANADA

El Athletic por fin logró sumar los 3 puntos lejos del amparo de San Mamés, llevaba 6 meses sin lograrlo, en un envite que bien pudo terminar con un empate, pero también con una renta mayor. Los dos goles de Aritz Aduriz, ya lleva 8 goles en 10 partidos y se convierte en el máximo goleador nacional, en la primera parte hacían presagiar un partido tranquilo, pero Iraizoz se encargó de evitar que los aficionados del Athletic y sus propios compañeros disfrutaran de una victoria clave, 3 puntos vitales y fundamentales. Link del resumen del partido: http://golstadium.goltelevision.com/ver_resumen.php?tipo=2&accion=ver&evento=resumen&id=248487&tipo=2&cache_id=13521164633Sgu63hyzU


Lo más extraño del partido corrió a cargo de Muñiz Fernández, cuya costumbre de estropear cualquier partido del Athletic rompió ayer al señalar un penalti que solo vio él y que sí fue, en el que Diakhaté golpeó con el brazo a Aduriz en el cuello dentro del área cuando el balón estaba a punto de ser despejado por un compañero del defensa granadista. El delantero rojiblanco asumió la responsabilidad y anotó la pena máxima con una tranquilidad inusual por estos lares desconocida a la hora de tirar penaltis.

Posteriormente, el donostiarra marcó el 0-2 con un zurdazo desde fuera del área. Tras unos minutos en los que el Athletic estuvo más pasivo intentando asentarse en el campo, asumió el mando del partido y las pocas posibilidades de que dispuso el Granada de arrimarse a la portería de Iraizoz quedaron truncadas gracias a Gurpegui y Amorebieta que realizaron un partido soberbio.


Pero un disparo muy parable de El Arabi no lo atajó ni lo despejó Iraizoz y dejó el partido sumido en la intranquilidad en las filas visitantes, que por momentos y de la mano de Muniain y Susaeta desplegaron ese fútbol al que nos mal acostumbraron la temporada pasada. A través de esas combinaciones vertiginosas se logró crear el suficiente peligro para haber aumentado la renta, pero De Marcos, Aduriz (que remató un córner al palo) y compañía no lograban acertar poniendo el balón en la portería lejos del alcance de Toño.

Los plomos se le fundieron a Iturraspe y el Athletic lo notó defensivamente, eso y que Muniain en el centro del campo está más para crear que para destruir, permitió que el Granada empezara a crear ocasiones, pero afortunadamente todas ellas golpeaban en Iraizoz, que no tuvo que realizar ninguna parada extraordinaria, simplemente estar bien colocado bajo palos. La entrada de San José, de la que fui muy escéptico, ayudó al equipo en la contención y la de Llorente por un golpeado Aduriz contribuyó a aguantar algo más el balón cuando se despejaba. Si bien es cierto que Llorente estuvo muy chupón siempre con compañeros mejor colocados y poco sacrificado en labores defensivas, dicen que estrenó botas.

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